LO QUE ESPERAMOS SER

Lo más gracioso de la vida es que vivimos pensando en cómo queremos ser, en qué queremos convertirnos. Es divertido verse sobre un escenario cantando la canción que más te emociona mientras la gente grita ilusionada, te haces famoso. Te ves fusil en mano corriendo por el campo de batalla, sintiéndote invencible, sintiendo que mueres por los demás. Te ves salvando a un niño en un paso de cebra mientras decenas de miradas curiosas aplauden tu épica hazaña. Te ves siendo un hombre de valores inquebrantables, que ante nada se rinde. Te ves siendo un actor de primera cuyos ojos son la octava maravilla. Te ves como quieres ser. El cómo soy... bah, es igual, prefiero luchar por lo que quiero ser.

EL CONSTRUCTOR

MARANATÁ

Se han sentado, han escuchado, han aplaudido.
Se han levantado y cogido sus armas. Han subido, han cargado, han apuntado... y ¡PUM! ¡PUM! ¡PUM!
Notas que salían de los cañones de sus guitarras, artillería de su batería, originalidad de su oficial. Proyectiles cargados de música, granadas de emoción, aplausos y sonrisas.
Han subido, han tocado... Y HAN GANADO.

Para vosotros, Maranatá.

EL CONSTRUCTOR

CÁNCER

Siento tanto haberle dejado ahí, esperando un porqué tras un lamentoso adiós... Pero no podía decirle que poco tiempo me faltaba para morir. Tal vez así ella pueda comenzar antes una nueva vida, una vida sin mí, una vida sin enfermedad. No puedo permitir que me vea en este estado, porque de esa manera, sé que se quedaría aquí, conmigo, esperando la muerte y deseando un milagro que jamás ocurriría. Lo hice por ella, por su libertad, por no hacerle esclava de un pobre moribundo que cuenta sus horas como la novia que espera segundo a segundo el momento de oir el "si quiero". Sólo espero que olvide mi rostro, que olvide mis ojos, mis manos... que viva recordándo unos años en los que una sonrisa mataba de amor.


EL CONSTRUCTOR

EL CAMINANTE

Una mochila, unas botas, una cantimplora... y mi intención de conocer.
Pasan los robles junto a mis huellas mientras canto hacia mis adentros la canción del lucero. Las suela de mis botas pelean ferozmente contra el ejército de piedras de un escarpado camino. Un desierto que avanza bajo la sombra de mi mochila. Andan raudos mis pasos, y mi cabeza, poco a poco, va conociendo los valores de una vida en viaje. Conozco a gente, a personas de mil razas diferentes. Bailes que junto al fuego se convierten en la unión de la tierra con el horizonte. Chispas de luz salen saltando de la boca de un leño ardiendo. Mis ojos sólo observan y graban. Mi cabeza recopila, analiza y comprende. Mi corazón llora de alegría. Siguen mis pasos veloces por el camino con la esperanza de encontrar otro mundo, otro pensamiento, otra cultura. Sonrío al verme enfrascado en el viaje de mi vida. Un viaje del cual deseo que tarde acabe. Y al final, de vuelta en mi sofá, junto a un fuego que da calor, espero recordar aquel baile que me hizo ser de nuevo, un niño que sueña.

EL CONSTRUCTOR

HIJOS DE LA GLORIA

Avistado el enemigo. Luchad por lo moral, por las causas nobles, por la libertad, por la vida. Es hora de dar esperanza a vuestro país.
Es ahora cuando podeis redimiros de los fatales actos de vuestro pasado. Andando hacia el momento que os dará la vida, hacia el momento donde ejerceréis vuestra libertad, vuestra confianza, vuestro amor, vuestra hermandad. Andando hacia la batalla, cabeza bien alta, espalda recta y fusil en mano. Suenan los tambores que marcan el ritmo de vuestro pasos. Suenan las gaitas que os darán fuerzas en la lucha. ¡Adelante hijos de España! ¡Adelante valientes hombres! ¡No temais muchachos, porque a partir de mañana... sereis hijos de la gloria!


EL CONSTRUCTOR

SILENCIO, LLÉVAME CONTIGO

Silencio... que reine el Silencio... lo más preciado del mundo. Cierro los ojos y dejo que el Silencio grite en mis oídos... como un susurro. Dios mío, me encanta esta sensación. Mil voces ya no hablan dentro de mi, mil voces ahora callan para dejarme vivir. Las notas del Silencio, de la armonía. ¿Dónde estabas viejo amigo? Lo entiendo; demasiadas voces, demasiados problemas, demasiadas injusticias... por eso te escondías. Pero ahora que ya no están... vuelves tú. Te pido un favor amigo mio llamado Silencio, cuando el ruido regrese... por favor, llévame contigo.


EL CONSTRUCTOR

ELLOS... SÍ

"La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho, habla poco".
Así habló Platón. Así es como debería funcionar el mundo. No sólo en las relaciones de pareja, si no también en las relaciones con los demás. Muchas veces, la persona que "no expresa" lo que siente, es la persona que más siente. No judguemos a aquellas personas que no dicen, porque muy posiblemente, sientan más el amor dentro de sus entrañas, de lo que muchos podamos enteder jamás. Bravo por ellos. Como se dice en mi pueblo: Ole sus cojones. Bravo... y gracias por ser como sois. Gracias a tí por ser como eres.

Para ti.

EL CONSTRUCTOR

MANUAL

"Muchos subestiman el trabajo manual del día a día, aporta libertad. Hay personas que vuelven felices a casa después del trabajo oliendo que apestan".
Película Como Dios.


EL CONSTRUCTOR

UNA SALVA POR LA VIDA

Adiós. Hoy me marcho, firme y contento. Bajo el sagrado sonido de las gaitas que me marcan el camino hacia la eternidad. Es hora de encontrarme con mi Padre de los cielos, que tanto tiempo llevaba esperándome y tanto tiempo llevaba yo queriendo abrazarle. Suenan los tambores y mis ligeros pasos vuelan hacia el Señor.

Suenan los tambores y muero, como estaba escrito, para descansar por fin en el seno de la vida. ¿Qué son los años comparados con la eternidad? Como peregrinos marchamos durante nuestros días por la tierra, respirando, odiando, amando, sintiendo, muriendo. Pero sólo como hombres vivos, marchamos hacia la eternidad. Recordadlo.

Ahora que marcho, dejad que os diga que un simple susurro, es capaz de apaciguar gritos, llantos y barbarie. Esperad el momento con paciencia, y cuando llegue… no dudéis. Haced el bien, a pesar de que tengáis que sacrificaros por los demás. Aunque vuestra vida peligre, luchad siempre por las causas nobles. Porque llegará un momento en vuestra vida donde tengáis que decidir entre vivir esclavo o morir libre.

Para ello no hay mejor ayuda que la de nuestro Padre del cielo. Orad junto a Él, todo llegará. Paciencia. Él está ahí, junto a vosotros. Y nunca jamás, bajo ningún concepto, perdáis la Fe.

Tranquilos, que vuestro corazón se alegre. Sentaos en la última roca de la costa y contemplad con orgullo lo que sois; hombres libres que lucharán por la vida... y por la eternidad. No lo olvidéis.

Ahora marcho, adiós compañeros del camino.

Hola, Padre de mi corazón, himno de libertad que reclamó mi presencia, himno de libertad que me dio la vida.

EL CONSTRUCTOR

TUS OJOS

En tus ojos veo cosas... veo cosas que para nada son contradictorias. En tus ojos veo sufrimiento... pero también felicidad. Tu mirada me dice que incluso sufriendo, se es feliz. El blanco de tus ojos me deja entender que tus lagrimas limpiaron tu mente... pero no tu corazón. Pero sonríes al saber que la esparanza sigue ahí, esperándote. Tus ojos me susurran que quieren vivir, que quieren vivir sin ahogarse en las lágrimas que cada noche derramas al recordar aquello que perdiste. Tus ojos gritan por vivir, y tú... sonríes al saber que nada es imposible.


EL CONSTRUCTOR

SÓLO QUIERO ESO

Sólo quiero salir de aquí. Dejar esta destruída mente que me corroe el alma. Sólo quiero cerrar los ojos y olvidar, comenzar una nueva vida, respirar por última vez para comenzar hacerlo por primera vez. Quiero que explote mi pecho y esto que llevo dentro salga y se evapore. Quiero gritar hasta no oírme. Quiero dejar de susurrar... pero sólo quiero oir susurros. Sólo quiero vivir...


EL CONSTRUCTOR

CAMINO DE LA FRONTERA

Lo que puede dar de sí un Golf es poco comparado con un concierto en Sanse. Merece la pena meterse cinco en un coche a las 23.30 de la noche, poner rumbo oeste... y partir.

Es curioso estar con alguien y no verle la cara hasta una hora después. Sí, es lo que ocurre cuando vas de copiloto y la otra persona está justo detrás de tu asiento. Pero bueno, así se hacen migas. Y qué grande es ponerse camino de la frontera... disfrutando a ratitos...

Para Ori Ella.

EL CONSTRUCTOR

MISS YO

Te odio porque no dejas de mirarte el ombligo. Te odio porque eres peor que Cristiano Ronaldo en un laberinto de espejos. Eres patéticamente patética. Te crees tan sublime, magnífica, impoluta, resplandeciente... que ni siquiera eres tú. No te das cuenta de que hay cosas más importantes que el tamaño de tus tacones. Tonta mas que tonta. ¿No habrás visto por casualidad a los demás? Uys por Dios, menuda pregunta... ¿Cómo vas a verlos si sólo existes tú? Perdona, no te molesto mas. A por cierto... antes de irme... te huelen los pies, cerda.
ZAS, en toda la boca.

EL CONSTRUCTOR

LOCO, MAZADO Y MUY TUYO

Porque estás muy loco. Porque estás muy mazado. Porque eres muy tuyo. Jajaja. Cuántas chorradas en un espacio de tiempo tan breve. Sí, porque nosotros también lo valemos. Porque donde quiera que vamos, lo damos todo y más. Vivimos mínimo al 110% ... sólo porque queremos. Porque estamos muy locos, muy mazados... y somos muy nuestros.

Para Ori Él.


EL CONSTRUCTOR

I´M LOOKING FOR...

Sólo encontrarás la respuesta si buscas. Y aunque busques... no siempre habrá respuesta. Todo es por algo, nada es por nada. Todo tiene un sentido, un destino, una razón de ser. ¿El porqué? No lo sé, tal vez esa sea la respuesta.


EL CONSTRUCTOR

CAOS

Perderse en el caos y cerrar los ojos es un psicodélico placer. Sentir cómo mil notas invaden tu alma, sentir una euforía incontenible que desborda tu imaginación, reir por dentro a más no poder, tu corazón latiendo hasta su límite. La emoción hace que no dudes en saltar de lo racional a lo increíble... un salto sin escalas. Notas tus latidos marcar el ritmo de un sinfín de sentimientos incontrolables. La música del caos... ¡Vamos! ¡Grita! ¡Deja que el caos te controle! ¡Salta!... y llega un momento sublime en el que piensas "Joder, el mundo es mío".

EL CONSTRUCTOR

HOY NO

Hoy no tengo ganas de escribir, bueno sí, pero no quiero hacerlo. Tengo sueño, son las 23:21.
Buenas noches.


EL CONSTRUCTOR